El equipo de Moore Interiorismo y Estudio Calena se encargan en esta ocasión del diseño de un local de peluquería en el que fusionan dos estilos muy diferentes, uno contemporáneo y otro más clásico, obteniendo como resultado un espacio de alto valor en el que los clientes se sienten propiamente como en casa.
Es en la zona de recepción, donde se instala un mueble de diseño propio y en blanco, en cuya parte trasera se instala una estantería para exhibir una gama de productos de peluqueria. La iluminación en éste área de define a partir de una luminaria suspendida de diseño, que en forma de esfera se convierte en el centro de todas las miradas.
La totalidad del mobiliario se elige en blanco con el fin de lograr esa sensación de limpieza, tan necesaria en un tipo de negocio como el de una peluquería. Las estancias quedan así mucho más iluminadas, y la sensación espacial es todavía mayor.
Una de las áreas protagonistas como es el 'lavacabezas' que ha recibido un tratamiento muy especial. En este caso se mantiene el pavimento original que pasa a estar iluminado por la fuente natural que deja pasar el lucernario. El resultado es el de una estancia muy especial, una de las más relevantes del local.
El encanto viene dado por ese toque clásico visible en el uso de la escayola, o la cálida iluminación aportada por elementos como los proyectores de carril. No cabe olvidar, que además de la estética, es un proyecto que busca una vertiente funcional, y por esta razón se escoge un tipo de luz más fría y blanca en algunos puntos para permitir el correcto trabajo de los profesionales.